El 7 de marzo se presentó en Madrid el proyecto Corredor del Sudoeste Ibérico con gran éxito de público y organización. El acto fue presentado por el Vicepresidente de la Real Sociedad Económica Extremeña de Amigos del País de Badajoz, Antonio García Salas.
En su intervención destacó la no existencia de infraestructuras en la región. Es particularmente grave la ausencia absoluta de kilómetros de Alta Velocidad en toda la región extremeña.
Terra incógnita
El Sudoeste ibérico destaca por ser una franja verde que coincide con la confluencia de los valles del Tajo y del Guadiana en su discurrir hacia el Atlántico.Desde antes de los romanos, este espacio fue la mejor vía de comunicación para comunicar el sur de la península con el resto de Europa. Durante la Reconquista, en el Siglo XIII se creó la frontera más antigua de Europa.
En el siglo XII se fractura la frontera creándose el espacio denominado raya hispano-lusa que continua existiendo como espacio de separación de dos naciones soberanas pero aliadas.
No ha existido una infraestructura de transportes y comunicaciones debido a la tradicional desconfianza mutua, quedando Portugal mirando hacia el Atlántico y España hacia el Mediterráneo.
Esta franja de territorio durante siglos ha estado perdiendo demografía y generando una economía de subsistencia de carácter extractivo y colonial.
En pleno Siglo XXI el territorio entre Lisboa y Madrid es una verdadera «Terra incógnita» por descubrir.
Antonio García Salas destaco que «hay que cambiar la visión de este espacio pasando de verlo como un sitio periférico , fronterizo y estático a verlo como central, de conexiones y flujos»
La próxima década puede ser definitiva para la transformación, una década de inversión y desarrollo. El corredor Sudoeste Ibérico puede ser un nuevo eje de desarrollo europeo.
Esperemos que así sea. Las Sociedades Económicas apoyarán todas las iniciativas posibles en este empeño.